El estudio de las fiestas extraordinarias promovidas por la corona y por la iglesia en el siglo dieciocho en la villa de Castellón, es el tema de este libro. En él se analizan las celebraciones que por orden de la corona se realizaban con motivo del nacimiento, la boda, la proclamación y la muerte de algún miembro de la familia real. También se estudian las fiestas que se celebran por mandato de la iglesia, éste es el caso de las que se hacen a causa de la canonización o beatificación de algún santo, y también las motivadas por catástrofes naturales (sequía, inundaciones, terremotos...). De cada fiesta se analizan el programa de festejos, las decoraciones que engalanaban toda la ciudad (luminarias, cornucopias, arquitecturas efímeras...) y los carros triunfales de los gremios que desfilaban en las procesiones que se organizaban por este motivo. Castellón en el siglo XVIII es una villa que aunque alejada del ámbito artístico de la Corte, también está inmersa en la cultura barroca europea, lo que se pone de relieve en este libro a través del estudio de las solemnidades públicas dieciochescas.
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