OJALÁ ESTUVIERAS AQUÍ
EL INSPECTOR MONFORT INVESTIGA UN ASESINATO EN EL MERCADO CENTRAL
Julio César Cano
SINOPSIS:
El Mercado Central de Castellón es uno de los lugares emblemáticos de la ciudad y el escenario de un crimen. Un hombre aparece degollado junto al cuarto donde se guardan los enseres de limpieza. Se trata de un empresario, Pedro Casas, que se dedicaba a comprar baratijas en China para luego venderlas en tiendas de bajo coste. El comisario Romerales vuelve, una vez más, a solicitar los servicios del carismático inspector Monfort, que está viviendo una etapa difícil, pues su madre se debate entre la vida y la muerte en el Hospital de Sant Pau de Barcelona. En una trama paralela que sucede en el pasado, una joven pareja con una vida complicada, decide abandonarlo todo y huir a un lugar donde nadie les conozca. A él le gusta boxear. A ella le gusta otro tipo de actividades mucho menos recomendables. La vida de estos dos jóvenes será la clave para la resolución del caso, en el que el inspector Monfort, la agente Silvia Redó, los agentes Terreros y García, y el siempre preocupado comisario Romerales, trabajarán sin tregua.
Una novela dentro de otra novela. Ojalá estuvieras aquí
encierra muchos secretos, muchas pequeñas novelas dentro de dos principales: La
historia de un boxeador clandestino y la historia sobre la investigación de un
asesinato sucedido en un escenario inverosímil: El Mercado central de
Castellón.
El mundo del boxeo, la gallística, las carreras de caballos,
los perros, el trampeo, la caza, el alcoholismo…, parece que los hemos
escondido debajo de la alfombra del comedor donde barremos la historia reciente
de nuestro país y todo eso que nos sobrecoge, nos abruma o por instintivo y
violento lo consideramos incorrecto.
Nos estamos convirtiendo en una sociedad de pensamiento plano; no nos atrevemos a ser divergentes, las tribus urbanas han desaparecido o se han suavizado tanto que no tienen identidades claras, pero esta novela revela esa cara B de todos nosotros, ese lado oscuro que precisa de una vía de escape que hoy día hemos tapado con cinta adhesiva y que aunque creamos bien atada algún día explotará ¿La espita? El desamor, la enfermedad, las drogas, el estrés… Cualquier elemento puede ser el detonante que saque lo peor de nosotros mismos porque nadie; ni padres, ni sociedad, ni sistema educativo nos ha enseñado los recursos necesarios para gestionar nuestros problemas y frustraciones.
Nos estamos convirtiendo en una sociedad de pensamiento plano; no nos atrevemos a ser divergentes, las tribus urbanas han desaparecido o se han suavizado tanto que no tienen identidades claras, pero esta novela revela esa cara B de todos nosotros, ese lado oscuro que precisa de una vía de escape que hoy día hemos tapado con cinta adhesiva y que aunque creamos bien atada algún día explotará ¿La espita? El desamor, la enfermedad, las drogas, el estrés… Cualquier elemento puede ser el detonante que saque lo peor de nosotros mismos porque nadie; ni padres, ni sociedad, ni sistema educativo nos ha enseñado los recursos necesarios para gestionar nuestros problemas y frustraciones.
Cada cual entenderá esta novela a su manera: Yo he imaginado
que la investigación sucede en el año 2000. Que el chaval conflictivo que en la
calle Temprado visita un Pub, tiene un Opel Astra medio Tunning. Que la trama
pugilística ocurre a finales de los 70, pero muchos retraerán o adelantarán
estos sucesos 15 o 20 años, por lo que la historia viajará en diferentes
tiempos de nuestro pasado y eso la convierte, la hace parte de nuestra historia.
Eso para mí ha sido la guinda del pastel.
Monfort es un inspector atormentado que se centra en su trabajo
para no caer en el abismo y que sin saber los motivos, vuelve una y otra vez a Castellón,
a Vilafranca, como si el universo se hubiese confabulado para que se
reencuentre con sus raíces, con su pasado. Para el lector que no conozca el
personaje le recomiendo que lea primero Asesinato en la Plaza de la Farola,
pues contiene los elementos principales que envuelven al Inspector Monfort y les
hará empatizar mejor con su historia, con su pasado y con todo lo que ahora en
esta tercera entrega ocurre.
¿El amor? Sí. El amor está presente en toda la novela. Es la
música que aunque no tenga pasajes específicos claros planea por encima de
nuestros protagonistas. Existe una sutileza femenina en la forma de escribir de
Julio César Cano en este aspecto: Si, pero no. Puede, pero no te lo digo. Me
gustas, pero no me atrevo. Te necesito, pero todavía no sé que te quiero. Eres
mayor que yo y tú eres más joven de lo recomendable para mí. Todo llegará, o
eso parece. Ya veremos que ocurre en MONFORT IV.
Opinión de Juan Vte. Centelles.
Librero.
El Mercado Central de Castellón es uno de los lugares emblemáticos de la ciudad y el escenario de un crimen. Un hombre aparece degollado junto al cuarto donde se guardan los enseres de limpieza. Se trata de un empresario, Pedro Casas, que se dedicaba a comprar baratijas en China para luego venderlas en tiendas de bajo coste. El comisario Romerales vuelve, una vez más, a solicitar los servicios del carismático inspector Monfort, que está viviendo una etapa difícil, pues su madre se debate entre la vida y la muerte en el Hospital de Sant Pau de Barcelona. En una trama paralela que sucede en el pasado, una joven pareja con una vida complicada, decide abandonarlo todo y huir a un lugar donde nadie les conozca. A él le gusta boxear. A ella le gusta otro tipo de actividades mucho menos recomendables. La vida de estos dos jóvenes será la clave para la resolución del caso, en el que el inspector Monfort, la agente Silvia Redó, los agentes Terreros y García, y el siempre preocupado comisario Romerales, trabajarán sin tregua.
Julio César Cano (1965, Capellades, Barcelona) trabajó en el negocio familiar hasta que el mundo de la música llamó a su puerta. Durante varios años ejerció como músico y mánager de grupos. Actualmente se dedica a la publicidad, actividad que compagina con la escritura. Como autor, es conocido tanto por sus ensayos y artículos sobre gastronomía y viajes, como por sus novelas y relatos, entre ellos Cocina, carretera y manta y Hojas de otoño. Ojalá estuvieras aquí es la tercera investigación del inspector Monfort, que sigue a Mañana, si Dios y el diablo quieren y Asesinato en la plaza de la Farola. Reside junto a su familia en La Pobla Tornesa, provincia de Castellón, donde transcurre la serie del inspector Monfort.
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